La mayoría de las personas tendemos a ponerle límites a nuestra vida. Con frecuencia decimos 'no puedo', 'no sirvo', 'no tengo', y creemos las etiquetas negativas que nuestros padres, nuestros maestros o nuestros familiares nos adjudicaron en algún momento de nuestra vida. Y al ponernos límites considerando lo que humanamente podemos hacer, nos olvidamos que lo que Dios puede hacer con nosotros es inmensurable. Un mensaje que te llevará a romper la cadenas que limitan tu mente, tus relaciones, tu visión y tus sueños.
Si piensas que lo que haces ahora es tan pequeño, tan falto de valor y significado como el aleteo de una mariposa, recuerda que lo que estás viviendo en este momento es sólo una etapa de tu vida. No te midas por lo que tienes ahora, por lo que haces ahora, por tus talentos ahora. Lucha, defiende tu plantío de lentejas, pero ten presente que las lentejas no son tu futuro. No vas a terminar tu vida en el sitio en el que estás. Esto es solo el cimiento de lo que puedes construir cuando dejas tu vara de medir a un lado y comienzas a medir con la vara del Señor.
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